A veces salgo a caminar por el centro, reconozco que debería hacerlo más seguido, ya que una de las ventajas, es encontrarte con sorpresas, gratas sorpresas obviamente. En esta oportunidad bajando por Rolando me encontré al grupo de Croquiseros Bariloche en la esquina con Tiscornia.
Charlando con ellos mientras se acomodaban en sus sillas o no, en dicha esquina, me cuentan que se crearon como grupo hace 10 años, que siempre se suman nuevos miembros, que no hace falta saber dibujar o pintar, simplemente con las ganas de compartir y aprender es suficiente.
Así fue que me quedé, a pesar del frío, a compartir un rato con ellos mientras comenzaban su tarea de en este caso dibujar la emblemática y pintoresca casita azul. Pero como siempre digo que mejor que escucharlos a ellos mismos en los próximos videos que les comparto.

Miradas colectivas de la ciudad a través del dibujo
Croquiseros Urbanos Bariloche es un colectivo conformado por personas aficionadas a dibujar al aire libre. Registran sobre el papel distintos espacios de valor patrimonial utilizando diferentes técnicas como el grafito, la tinta o la acuarela. De este modo se proponen preservar en sus obras, lugares y construcciones antiguas enmarcadas en la paisaje urbano o naturales que perduran en la ciudad y sus alrededores.
Los Croquiseros Urbanos Bariloche forman parte de un movimiento presente en todo el país y en gran parte del mundo. Recuperan el valor del dibujo como un lenguaje expresivo que permite retratar lugares inmersos en el paisaje urbano. La premisa principal es registrar a través de un croquis el patrimonio urbano, arquitectónico o patrimonial, para capturar in situ la esencia y el entorno de cada espacio, disfrutando de dibujar al aire libre.
En San Carlos de Bariloche, los croquiseros comenzaron su actividad en abril de 2013. El grupo fue conformándose con participantes de orígenes y profesiones diversas. Llevan más de más de ciento cuarenta salidas. Sin nombres propios, pero con una gran variedad de oficios y profesiones —arquitectos, artistas plásticos, investigadores, docentes, guías de turismo y público en general— los croquiseros urbanos se convocan los sábados por la tarde para dibujar edificios históricos, casas antiguas y lugares emblemáticos de la ciudad y zonas cercanas.
Los elementos básicos de un croquisero son el lápiz y el papel. Sobre esa superficie surgirán los croquis, dibujos rápidos y gestuales cargados de líneas, que luego van definiéndose con trazos más firmes, enriquecidos con detalles propios del espacio urbano: el arbolado, las luminarias, los transeúntes o esos detalles pintorescos de cada lugar. Cada croquis va cobrando vida a partir de las impresiones de su autor, que con estilo y personalidad va poniendo el foco en ciertos detalles y desecha otros. De esta manera, aunque el motivo sea el mismo, resultan obras muy diferentes. Surgen así trabajos donde el espectador completa la obra a partir de lo plasmado por el autor.
El dibujo requiere hacer una pausa, aprender a observar, focalizar la mirada para luego trazar a mano alzada eso que se observa con detenimiento. Para aprender a dibujar hay que empezar a dibujar; si es con otros que comparten el mismo interés, resulta más provechoso.
Los croquiseros ponen en juego su percepción, miran con atención las formas, los contornos, las luces y las sombras. Así desarrollan las habilidades propias del dibujo como la composición, el sombreado, la y la perspectiva, entre otras. Del mismo modo van perfeccionando su técnica y desarrollando un estilo muy personal. Cada croquisero comparte lo que sabe o cuenta su experiencia acerca del dibujo. Es por ello que en este grupo no se requiere experiencia previa ya que se aprende con el otro a partir de lo compartido en las salidas.
Los croquiseros difunden sus salidas y sus producciones a través de las redes sociales, espacio donde también comparten publicaciones de interés y actividades de otros grupos similares.
Las salidas terminan siempre con una mini-exposición al aire libre donde los participantes intercambian impresiones, consejos y recomendaciones, a partir de las cuales todos aprenden. Como comunidad global, los croquiseros urbanos proponen actividades abiertas y gratuitas, intercambian experiencias, comparten saberes y disfrutan del dibujo como actividad colectiva.
@croquiserosbariloche

